martes, 22 de diciembre de 2009

Pena y Gloria de un Corredor: Intro


Pocas veces en la vida tenemos la oportunidad de crear algo. Es un encuentro con nosotros mismos como ver por primera vez el mar, como perdernos por primera vez en nuestros pensamientos al admirar las majestuosas montañas y volcanes por primera vez, y por qué no, como hacer el amor por primera vez, encontrarnos descubriendo nuestro cuerpo de una forma que jamás habíamos sentido antes, deleitar nuestros placeres, nuestra visión y nuestros oídos, con cosas tan sutiles y tan grandiosas que se quedan grabadas en nuestra mente, en la mente de la gente y en las memorias del tiempo.

Esta oportunidad he querido crear algo, crear una vida, narrar una historia y contar un cuento que nos haga ver otras vidas, sentir otras emociones, sufrir otros pesares y conocer nuevas alegrías. Esta ocasión, les narro la historia de alguien que nació con una estrella que nunca se ha apagado, y aunque no ha sido un personaje recordado por todos, ha sido un alma sufrida que a pesar de los golpes de la vida, se ha mantenido en pie con el único afán de inspirar a otros, ayudar a otros y fingir que no tiene hambre en este mundo solitario y triste, solamente para conseguir sus más grandes y bizarros anhelos.

De la carencia viene la consciencia y de la consciencia la pasión y el empeño por mejorar, y demostrar que con decisión y con total consentimiento de las consecuencias, todo en esta vida se puede lograr.

- Ralex

1 comentario:

†Нαяdсoяэ♥Gסŧhiс† dijo...

como dicen no hay mal que por bien no vengas. ni bien que no haga mal...

los cambios en la vida son necesarios por mas que rompan el corazon o te entregen al tiempo para que se curen las heridas